Uno de los temas que más genera ansiedad en mis clientes son las vacaciones, los viajes y cómo mantenerse en el camino correcto después de todo el arduo trabajo que han realizado para hacer cambios en su estilo de vida. Lo primero es lo primero, puedes disfrutar de unas vacaciones mientras te mantienes saludable, lo prometo. Mantener tu rutina de salud durante las vacaciones no se trata solo de comida, comer fuera, elegir las mejores opciones; se trata de desestresarse, divertirse, explorar, absorber la buena energía de la naturaleza y pasar tiempo de calidad con tus seres queridos o en solitario. Se acerca la temporada de vacaciones y para lograr conservar esos hábitos que ya has adquirido, he preparado 3 tips para llevar unas vacaciones saludables.

Deja los “debes” de las conversaciones contigo mismo

Te reto a preguntarte cuáles son los “deberes” que te dices a ti mismo cuando te estás preparando o estás de vacaciones. ¿Cómo puedes darte mucho más amor y poco más de permiso para disfrutar? Ten en cuenta y manténte presente sobre la base que ha construido a lo largo de cada movimiento y decisión.

Encuentra tus lugares favoritos enfocados en la salud

Esto es un hecho. Si puedes encontrar algo de consuelo al saber que tienes un par de lugares a donde puedes tomar alimentos ricos en nutrientes, ¡haz que sea tu lugar para ir seguido! Beber mucha agua, comer verduras (¡fibra!), Grasas saludables, fruta fresca y proteínas, ¡siempre me hace sentir bien! Saldrás de tu rutina normal, así que priorizas obtener cualquier cosa que pueda ayudarte a mantenerte en el camino, ya sea en términos de digestión, energía y descanso, o simplemente mantenerte hidratado.

Disfruta y no te sientas culpable por eso

Hacer cosas que no estén dentro de la rutina o dentro del parámetro de hábitos de vida saludable no están solo relacionados con la comida, también puede ser las horas de sueño, qué tanto estás tomando agua, entre otros. En época de vacaciones está bien salirse de eso que hemos establecido. Piensa que son solo cosas que están fuera de lo normal; por mucho que seas una criatura de rutina, está bien salir de ella. Así que disfruta y no te sientas culpable por eso.